La fachada ventilada destaca por su rápida instalación frente a los sistemas convencionales, como los revestimientos encolados o los revocos estructurales. Esta agilidad se debe a su sistema de fijación mecánica, que reduce los pasos de construcción y optimiza el proceso de montaje.

Factores que contribuyen a una instalación más rápida:

1. Fijación mecánica sin largos tiempos de curado
   A diferencia de los revestimientos encolados, que requieren mortero y largos periodos de secado, la fachada ventilada utiliza un sistema de perfiles metálicos y fijaciones que permiten el montaje inmediato de los paneles, agilizando la ejecución de la obra.
2. Corrección de plomadas sin necesidad de enlucido
   El sistema estructural regulable permite corregir desniveles de muros sin necesidad de regularización previa con mortero, reduciendo pasos y tiempo de obra.
3. Montaje modular y secuencial
   El proceso de instalación se realiza en módulos, permitiendo operar simultáneamente diferentes frentes de trabajo. Esto garantiza una mayor eficiencia en fachadas grandes y permite realizar los trabajos en plazos reducidos.
4. Uso de materiales industrializados y precortados
   Muchos de los revestimientos utilizados en fachadas ventiladas se entregan ya dimensionados según proyecto, evitando largos cortes y ajustes en obra.
5. Menos interferencia climática
   Como la instalación no depende de mortero u otros materiales húmedos, el proceso no sufre retrasos significativos en días de lluvia, asegurando la continuidad en la ejecución.

Ventajas de una instalación rápida:

• Reducción de costos de mano de obra y equipos.
• Menor impacto en el cronograma general de trabajo.
• Mayor previsibilidad y control sobre los plazos.
• Trabajo más limpio y organizado, con menor generación de residuos.

Con todos estos factores, la fachada ventilada se convierte en una solución eficiente para quienes buscan rapidez en la ejecución sin sacrificar la calidad, durabilidad y estética del proyecto.

El mantenimiento de las fachadas ventiladas es relativamente sencillo y ofrece importantes ventajas frente a los sistemas convencionales. Como este tipo de fachada no está en contacto directo con la estructura del edificio y dispone de una capa de ventilación, los revestimientos se ven menos afectados por las variaciones térmicas y la humedad, lo que reduce la necesidad de reparaciones frecuentes.

Aspectos principales del mantenimiento de fachadas ventiladas

1. Inspección periódica
   Se recomienda realizar inspecciones periódicas para comprobar la integridad de los paneles, fijaciones y estructura de soporte. Normalmente, una inspección visual cada dos años es suficiente para identificar desgaste, desplazamiento o cualquier necesidad de intervención.
2. Limpieza fácil y eficiente
   Como el sistema reduce la acumulación de suciedad y humedad, la limpieza de la fachada ventilada es sencilla y puede realizarse con agua y detergentes neutros. En muchos casos, la lluvia ya ayuda a mantener limpia la superficie, especialmente en materiales como la porcelana y el vidrio, que tienen baja porosidad y resistencia a las manchas.
3. Reparación y sustitución de piezas
   Si es necesario sustituir un panel dañado, el proceso es rápido y no requiere grandes intervenciones en la estructura del edificio. Los sistemas de fijación permiten la extracción y sustitución de piezas individuales sin comprometer el resto de la fachada.
4. Mayor durabilidad
   Gracias a la ventilación continua y a la protección contra la humedad, los materiales de fachada ventilada tienen una vida útil más larga en comparación con los sistemas tradicionales. Esto significa menores costos de mantenimiento correctivo y una mayor preservación de la estética a lo largo de los años.

En definitiva, la fachada ventilada no sólo mejora el rendimiento térmico y estético de los edificios, sino que también reduce significativamente las obras y los costes de mantenimiento, siendo una solución eficiente y duradera.

La fachada ventilada ofrece una serie de beneficios que inciden positivamente en el rendimiento térmico, la durabilidad, la estética y la sostenibilidad de los edificios. Conozca las principales ventajas de este sistema:

1. Eficiencia térmica y ahorro energético
   El espacio de aire entre el revestimiento y la estructura del edificio actúa como un aislante natural, reduciendo la transferencia de calor. En verano, el calor exterior se disipa antes de llegar al interior, mientras que en invierno la fachada minimiza las pérdidas térmicas. Esto se traduce en un menor consumo de energía en aire acondicionado, haciendo que el edificio sea más eficiente y económico.
2. Protección contra la humedad y mayor durabilidad.
   La circulación de aire continua evita que la humedad se acumule en la pared exterior, evitando problemas como goteras, moho y eflorescencias. Como resultado, los materiales sufren menos degradación con el tiempo, aumentando la durabilidad de la fachada y reduciendo los costes de mantenimiento.
3. Facilidad de mantenimiento
   A diferencia de los revestimientos tradicionales, las fachadas ventiladas requieren poco mantenimiento. La limpieza se puede realizar con agua y detergentes neutros, y la sustitución de piezas individuales es sencilla, sin necesidad de grandes intervenciones en la estructura del edificio.
4. Libertad estética y personalización
   El sistema permite la aplicación de diferentes materiales, como cerámica, porcelana, HPL, vidrio, metales y piedras naturales. Esto permite crear fachadas modernas, elegantes y personalizadas, satisfaciendo las necesidades estéticas de cada proyecto.
5. Sostenibilidad
   Además del ahorro energético, la fachada ventilada contribuye a la sostenibilidad del edificio al permitir el uso de materiales reciclables y reducir la necesidad de mantenimiento frecuente. Además, mejora el confort térmico sin depender exclusivamente de sistemas de climatización mecánicos.
6. Apreciación de la propiedad
   La combinación de estética sofisticada, eficiencia energética y durabilidad hace que los edificios con fachadas ventiladas sean más valorados en el mercado inmobiliario, añadiendo valor a la inversión.
7. Agilidad en la instalación
   El sistema de fijación de fachada ventilada permite un montaje más rápido y limpio respecto a los métodos tradicionales, reduciendo plazos de obra y costes de mano de obra.

Con todos estos beneficios, la fachada ventilada se destaca como una solución innovadora, ideal para proyectos que buscan alto rendimiento, modernidad y sostenibilidad.

Corrección de plomada con fachada ventilada

Una de las principales diferencias entre las fachadas ventiladas y los sistemas de revestimiento tradicionales es la posibilidad de corregir desajustes estructurales, como desviaciones de plomada en las fachadas de los edificios. Esto se debe a la flexibilidad del sistema de fijación, que permite ajustes precisos durante la instalación.

1. Estructura de soporte ajustable
   El sistema de fachada ventilada utiliza montantes y soportes de aluminio que se fijan a la estructura del edificio. Estos perfiles cuentan con ajustes que permiten corregir desviaciones respecto al muro original, garantizando una perfecta alineación del revestimiento exterior.
2. Compensación por irregularidades
   En edificios antiguos o construcciones con pequeñas imperfecciones estructurales, el uso de espaciadores y ajustes en los soportes metálicos permite la creación de un nuevo plano uniforme para la fachada, sin necesidad de fuertes intervenciones en la mampostería. Esto reduce la necesidad de realizar revoques correctivos, ahorrando tiempo y costos en el sitio.
3. Instalación nivelada y segura
   Durante el montaje se utilizan niveles láser y plantillas para ajustar los perfiles metálicos y garantizar que el revestimiento quede perfectamente alineado, independientemente de posibles desajustes en la estructura original.
4. Mayor precisión y estética mejorada
   Como el sistema permite ajustes milimétricos, el resultado final es una fachada con un aspecto impecable, sin desalineaciones visibles. Esto es esencial para proyectos de alta gama, donde la estética y la precisión son fundamentales.

Ventajas de la corrección de plomada con fachada ventilada

Evita la necesidad de realizar revoques correctivos en grandes áreas, reduciendo costos y tiempo de construcción.
Permite su instalación en edificios antiguos sin necesidad de realizar grandes reformas estructurales.
Asegura un acabado uniforme y alineado, mejorando la estética de la construcción.
Facilita la instalación de revestimientos de gran formato, que requieren de un plano perfecto para un ajuste preciso.

La posibilidad de corregir plomadas de forma práctica y eficaz hace de la fachada ventilada una solución ideal tanto para rehabilitación como para obra nueva, ofreciendo un sistema versátil, tanto a nivel técnico como estético.

La fachada ventilada es una solución altamente eficiente para proyectos de rehabilitación, permitiendo la modernización de edificios antiguos sin necesidad de grandes intervenciones estructurales. Su instalación rápida y versátil mejora el rendimiento térmico, estético y funcional del edificio, aumentando su durabilidad y valor en el mercado.

Principales ventajas de las renovaciones

1. Renovación estética sin grandes reformas

• Permite transformar completamente la apariencia del edificio, aplicando revestimientos modernos y sofisticados.
• El sistema de fijación mecánica permite cubrir fachadas desgastadas sin retirar el revestimiento antiguo, reduciendo costes y plazos de obra.

2. Corrección de desalineaciones e imperfecciones

• El sistema estructural ajustable compensa las desviaciones de plomada y las irregularidades de la fachada existente, eliminando la necesidad de revoques correctivos.
• Asegura un acabado uniforme y alineado, independientemente del estado de la estructura original.

3. Mejora del confort térmico y la eficiencia energética

• El espacio ventilado entre el revestimiento y la estructura reduce la absorción de calor en verano y minimiza las pérdidas térmicas en invierno.
• Reduce la necesidad de aire acondicionado artificial, lo que supone un ahorro energético y un menor impacto ambiental.

4. Protección contra la humedad y mayor durabilidad.

• La ventilación continua evita la acumulación de humedad, evitando la infiltración, el moho y la degradación de la mampostería.
• Prolonga la vida útil del edificio, reduciendo los costos futuros de mantenimiento y reparación.

5. Instalación rápida y limpia

• El sistema modular e industrializado permite una ejecución ágil, sin necesidad de demolición o retirada de revestimientos antiguos.
• Reduce la generación de escombros y residuos, haciendo la obra más sostenible y con menor impacto para los ocupantes del edificio.

6. Aumento del valor de la propiedad

• Modernizar la fachada mejora la percepción del edificio en el mercado, haciéndolo más atractivo para inversores, inquilinos y compradores.
• Puede contribuir a la valorización del patrimonio y a la adaptación del edificio a los estándares de rendimiento y sostenibilidad.

Conclusión

La fachada ventilada es una opción ideal para rehabilitaciones porque ofrece una solución moderna, eficiente y duradera, sin necesidad de grandes reformas. Con beneficios estéticos, térmicos y estructurales, transforma edificaciones antiguas en construcciones de alto estándar, con mayor confort y ahorro para sus usuarios.

La fachada ventilada permite la aplicación de una amplia variedad de materiales, cada uno con características específicas en cuanto a estética, resistencia y mantenimiento. La elección del revestimiento depende del estilo arquitectónico deseado, el rendimiento esperado y las condiciones climáticas de la región.

Materiales principales utilizados

1. Porcelana

• Alta resistencia mecánica y durabilidad.
• Baja absorción de agua, evitando manchas y fugas.
• Disponible en una variedad de acabados, texturas y colores, incluyendo imitación madera, hormigón y piedra natural.

2. Cerámica extruida

• Excelente resistencia a los impactos y a las inclemencias del tiempo.
• Permite fachadas con ventilación controlada gracias a sus formas abiertas.
• Disponible en diferentes tonos y texturas.

3. HPL (laminado de alta presión)

• Paneles laminados de alta presión, compuestos por capas de papel kraft impregnadas con resina.
• Ligera y resistente, con gran variedad de estampados y colores.
• Fácil mantenimiento y excelente comportamiento frente a los rayos UV.

4. ACM (material compuesto de aluminio)

• Paneles compuestos por dos láminas de aluminio con un núcleo de polietileno o material mineral.
• Ligero, resistente y flexible, permitiendo fachadas modernas y curvas.
• Disponible en diferentes colores y acabados metalizados.

5. Piedra natural

Recubrimiento sofisticado y de gran durabilidad, ideal para fachadas de alta gama.

• Se puede aplicar en diferentes formatos, como placas de gran tamaño o mosaicos.
• Materiales comunes: granito, mármol, cuarcita y pizarra.

6. Vidrio

• Da un aspecto moderno y elegante a las fachadas.
• Se puede combinar con otras soluciones para el control térmico y acústico.
• Disponible en versiones reflectantes, serigrafiadas o laminadas.

7. Paneles de fibrocemento

• Compuesto de cemento reforzado con fibra, garantizando ligereza y resistencia.
• Opción sostenible y de fácil mantenimiento.
• Disponible en diferentes colores y texturas.

8. Paneles metálicos (acero corten, aluminio, zinc-titanio)

• Proporcionan fachadas industriales y contemporáneas.
• El acero corten crea un efecto de oxidación controlada, garantizando una estética única y una alta resistencia.
• El aluminio y el zinc-titanio son ligeros, duraderos y resistentes a la corrosión.

Conclusión

La fachada ventilada permite la combinación de diferentes materiales para crear composiciones únicas y personalizadas. Además de la estética, la elección del recubrimiento debe considerar factores como la resistencia, el mantenimiento y el rendimiento térmico para garantizar un proyecto eficiente y duradero.